La Comunicación Grupal es la que ocurre cuando un conjunto de personas conforman una unidad prácticamente identificable y realizan transferencia de mensajes para la interacción, convivencia y desarrollo del grupo en busca del cumplimiento de sus objetivos.
La comunicación grupal se da en reuniones entre los miembros de un departamento, comité, grupo de trabajo, equipo de proyecto o cualquier otro grupo unido por un propósito común.
Cuando la comunicación grupal es efectiva, puede resultar en un equipo muy productivo y muy unido. Se pueden establecer relaciones largas y duraderas que son capaces de lograr hazañas extraordinarias.
En la comunicación grupal, las personas tienden a asumir roles y posturas que afectan los resultados de la comunicación. Algunas de estos roles y posturas son útiles y otros no.
NIVELES DE COMUNICACIÓN EN UN GRUPO
Según se implique cada uno en la comunicación personal con los demás, se dará uno de los siguientes niveles:
Formal: Es algo superficial, pues se refiere sólo a las funciones que cada uno desempeña.
Exterior: La comunicación se queda en los aspectos del entorno personal.
Perceptivo: Cada uno se comunica según percibe al otro
Empático: Se viven las experiencias del otro como propias, con una profunda actitud de empatía.
Existencial: El animador ha de aspirar a este nivel existencial.
Sus características más importantes son:
La soledad: Sólo en la soledad se puede escuchar el propio interior para encontrarse a sí mismo.
La manifestación: Cada uno se realiza al manifestarse a los demás.
La lucha: La comunicación no se da si no existe lucha, renuncia a los propios intereses para relacionarse con el otro.
El desinterés: Sólo llega a comunicarse en profundidad el que vive gratuitamente con y para los otros.
La igualdad: No se trata de uniformidad, sino de una especie de apropiación de la existencia del otro, pero respetándole y dejándole que sea él mismo.
El silencio: La unidad interior de la persona sólo se construye con el silencio, que por eso mismo favorece la comunicación con los otros.
FACTORES QUE FAVORECEN LA COMUNICACIÓN EN UN GRUPO
La Escucha Activa: Cuando lo más importante de la comunicación es escuchar, atender a lo que se percibe (oral y no verbal).
Fase A: captar la información.
Fase B: interpretar lo que se capta.
Fase C: valorar la información, evaluación de cómo vamos a utilizar esa información en la conversación.
Fase D: dar receptividad a la información, feedback.
Para que la escucha sea eficaz:
No hay que prestar atención a lo que nos rodea (solo el interlocutor).
Desear obtener información.
Observar a nuestro interlocutor (para captar gestos...).
Comportamiento no verbal adecuado: contacto visual y atención.
Resumir las ideas esenciales.
Optar por: no interrumpir, ser comprensivo y oír.
Mostrar Empatía: ponernos en lugar del otro, no significa estar de acuerdo, sólo entender lo que a la otra persona le pasa y hacérselo saber.
Saber Preguntar: las preguntas pueden ser de dos tipos, abiertas (dan lugar a una respuesta larga) o cerradas (se responden con sí o no). Para saber preguntar hay que: hacer preguntas cortas y directas, una sola pregunta cada vez, esperar la respuesta, no responder las propias preguntas.
http://impcomu.blogspot.mx/2011/07/la-importancia-de-la-comunicacion.html
Defensas ante la comunicación
No se llega a una comunicación profunda hasta que uno no se libera de sus propias defensas.
Los miembros del grupo tratan de comunicarse, pero al mismo tiempo tienen reservas en hacerlo.
Hay personas que en el tiempo de la reunión se sienten bloqueadas y hasta imposibilitadas de expresarse. Y, sin embargo, en otras ocasiones se muestran amables y locuaces.
Esos bloqueos suelen ser inconscientes y obedecen a la situación afectiva que los motiva: timidez, reacción ante una palabra o un gesto que desconciertan, etc. Por eso mismo, no hay que dejarse llevar de la primera impresión al tratar con los demás, quedándose con una percepción incompleta de su persona. Para formarse una idea más exacta del otro, hace falta escuchar personalmente lo que él dice de sí mismo.
Causas que provocan los bloqueos
* Tener una imagen no real de sí mismo, provocada por complejos, autosuficiencias, etc.
* Tener una imagen deformada de los demás, no aceptarlos, ponerse a la defensiva, sentirse herido por sus juicios.
* Utilizar un lenguaje inadecuado o no comprensible por el receptor.
Actitudes que se pueden dar en un grupo
* Aislarse de los demás, fingiendo que se quiere actuar en solitario o que no se es entendido por los demás.
* Intentar hacerse el bueno, pero evitando en el fondo toda responsabilidad.
* Mostrar una aparente cordialidad con todos, mas procurando no conceder demasiada confianza.
* Buscar una amistad profunda, esperando que así uno será más valorado, al mostrar su madurez personal.
Factores que influyen en la comunicación
Los factores que influyen y perturban la comunicación varían según las personas. Sin querer ser exhaustivos, se podrían reducir a los tres siguientes:
* Enmascaramiento de la conducta.
En las relaciones de un grupo, es frecuente que los participantes mantengan una apariencia exterior que no refleja necesariamente sus sentimientos interiores o pensamientos.
Se utilizan verdades a medias para mantener la imagen que se pretende proyectar. Por ejemplo, uno dice a otro del grupo: <<Me parece que no te aceptas a ti mismo>>. En realidad el que lo dice trata de disimular lo que le pasa a él mismo.
Es muy fácil engañar con palabras, pero es extremadamente difícil encubrir las verdaderas emociones utilizando signos no verbales.
* Interpretación
La experiencia dice que unos mismos estímulos son percibidos de diferente modo por cada individuo.
Cada persona selecciona todo lo que percibe, en base a sus intereses y actitudes. Por ejemplo, una persona insegura puede interpretar como una amenaza un mensaje que en realidad es positivo.
La voz, las palabras, los gestos, etc. del que habla llegan a ser interpretados de forma positiva por un oyente y de forma negativa por otro.
Si uno escucha selectivamente, acoge sólo lo que le interesa, y no la totalidad de lo que el otro le quiere decir. Esa actitud es muy corriente y provoca malentendidos. Cuando alguien selecciona de ese modo lo que escucha se cierra a sí mismo la posibilidad de crecimiento y de cambio.
* Falta de atención
A veces un oyente se anticipa a responder, cuando piensa que ha comprendido lo que su interlocutor le va a decir a continuación. De ese modo, se obstaculiza la acogida del mensaje, porque se centra toda la atención en cómo responder al otro, más que en comprender lo que realmente quiere decir.
La falta de atención puede ser producida también por el agotamiento mental, por el griterío ambiental, por el entorno físico y otros factores.
La impaciencia de quien pretende obtener enseguida el resultado impide la atención, porque no da tiempo a que la comunicación se produzca, crezca, se profundice.
Frente a todas las defensas o barreras antes descritas, la función del animador se podría resumir así: él ha de capacitar a cada persona y al grupo a mantener siempre una comunicación positiva.
El grupo es vital, no sólo por las acciones que lleva a cabo sino también por la calidad de la comunicación que provoca. Animar un grupo es ayudarlo a desarrollar una buena comunicación y unas interacciones positivas.
Aunque eso es tarea de todos los miembros del grupo, lo es principalmente del animador; él ha de crear las condiciones para que la comunicación en el grupo resulte siempre positiva.
Condiciones de la comunicación en grupo
Diversidad y originalidad
Es preciso tener en cuenta y valorar la diversidad y originalidad de cada persona.
No hay dos personas iguales. Es necesario pensar en las condiciones personales en las que se encuentra quien ha de recibir cultura, proyectos, ideales, experiencias religiosas.
Las palabras que cada uno usa tienen una gran carga afectiva de la cual, a veces, ni él mismo es consciente, y desencadenan en los demás reacciones imprevisibles. El animador no es un maestro que dicta un texto y lo hace aprender de memoria, sino alguien que comunica lo que él mismo vive.
Comunicación y maduración
Hace falta favorecer la disponibilidad a comunicar, ayudando a las personas a madurar en esa actitud.
Optar y favorecer la comunicación es elegir la verdad y la libertad. Es preciso liberarse de los propios prejuicios. Eso es un trabajo difícil, pero sólo de ese modo se logra saltar la barrera que aísla e impide la comunicación. Porque la comunicación sólo es real cuando llega a ser recíproca. La comunicación exige un largo aprendizaje; y comunicando se crece.
Aprendizaje y cambio
La comunicación pide el mantener vivo el deseo de aprender, de cambiar, cuando es preciso, esquemas de pensamiento o modos de vivir. Con frecuencia se tiene miedo al cambio y eso lleva a aferrarse a las propias ideas o modos de vivir, como si fueran los únicos posibles. Sólo existe una verdadera comunicación cuando en todos los miembros del grupo se produce alguna transformación, se abren nuevos horizontes. A esa transformación han de estar abiertos todos los miembros del grupo, también el animador.
http://www.mercaba.org/ARTICULOS/L/47_la_comunicacion_en_grupo.htm